Adelante Izquierda Gaditana exige que Veedor vuelva a ser peatonal y reclama el impulso de los entornos escolares seguros

Adelante Izquierda Gaditana exige que el Ayuntamiento de Cádiz vuelva a declarar peatonal la calle Veedor y parte de la plaza  del Mentidero, toda vez que se ha constatado que ha sido una decisión adoptada por el alcalde, Bruno García, “sin el más mínimo consenso” y “poniendo la seguridad de la comunidad educativa Carlos III y del barrio del Mentidero en un segundo plano”.

Representantes del Grupo Municipal Adelante Izquierda Gaditana han estado presentes tanto en las reuniones previas como en la constitución de la plataforma contra la apertura al tráfico de las calles Veedor y plaza del Mentidero. Allí han adoptado un papel de plena colaboración y de puesta a disposición de la capacidad de acción del Grupo Municipal frente a este problema creado por el alcalde.

En esta misma línea, tanto la concejala Lola Cazalilla como la concejala Lorena Garrón reclaman al Equipo de Gobierno que comience a impulsar las actuaciones ya proyectadas por el anterior gobierno municipal para lograr entornos escolares seguros en distintos colegios de la ciudad. Estas actuaciones comprendían mejoras de seguridad y paso en los entornos de los colegios Salesianos, Amor de Dios, Juan Carlos Aragón, Columela, San Severiano, Rafael Alberti, Rebaño de María y los dos de Telegrafía (Tierno Galván y Aguilar Quignon).

Cazalilla y Garrón recuerda que lo que se busca con las actuaciones proyectadas es que las calles más utilizadas por el alumnado y sus familias sean transitables y seguras, contribuyendo así a la autonomía de los niños y niñas en un entorno seguro, mucho más amable, menos ruidoso y con menos contaminación.

En concreto, se trata de acondicionar los accesos a una decena de colegios de la ciudad, tanto públicos como concertados, para mejorar la accesibilidad, la seguridad del alumnado y rebajar el ruido con una serie de actuaciones que tienen un coste perfectamente asumible por el Ayuntamiento de Cádiz y que es el equivalente, por ejemplo, al dinero que se está gastando el Consistorio gaditano en la subida de sueldo del alcalde y de sus primeros tenientes de alcaldía en los dos primeros años de este mandato.

“Cádiz había iniciado una senda de seguridad, de mejora de los entornos escolares, de mayor accesibilidad y menos ruido siguiendo ejemplos avanzados de grandes ciudades europeas, y no se puede consentir que el alcalde y el gobierno del PP den pasos atrás en seguridad y condenen a Cádiz a ser una ciudad más peligrosa, menos cómoda y con una concepción de movilidad más parecida a la de los años 90 que a la del año 2023”, afirman las concejalas de Adelante Izquierda Gaditana.